Esta
expresión hace referencia a la forma aproximada de calcular medidas
o cantidades sin precisión exacta y sin usar ningún instrumento o
herramienta de medición. Su origen se remonta a la época feudal en
la que existía una profesión llamada cubero, quienes se encargaban
de realizar las cubas o tinajas para meter líquidos como agua,
aceite o vino. Estas medidas cambiaban mucho según los señores
feudales y el cubero pues, al realizarlas de forma artesanal una a
una, debía de tener muy buen ojo para que todas tuvieran una
capacidad, forma y tamaño parecidos.

No hay comentarios:
Publicar un comentario